Mariola García Arellano
Directora Bejob Santillana
La responsabilidad social corporativa está en el ADN de Bejob. Tanto en España como en la mayoría de los países, la demanda de perfiles tecnológicos en el ámbito laboral sigue siendo creciente: diferentes formas de hacer las cosas requieren nuevos conocimientos. Sin embargo, tenemos que asegurarnos de que la oferta de profesionales con las competencias y habilidades que requieren estos puestos es suficiente para dar una respuesta acertada a la economía y a la sociedad. Actualmente conocemos que muchas empresas tienen dificultades para contratar determinados perfiles tecnológicos, bien sea porque no hay suficientes o incluso porque todavía no está claramente definido ese perfil profesional. Y este es un problema social, no sólo empresarial.
Lo que proponemos desde Bejob es trabajar desde las organizaciones y las empresas hacia fuera, es decir, «enriquecer» nuestra propia actividad con proyectos de valor social enfocados a colectivos en «condiciones menos favorables». El resultado está comprobado, el beneficio es doble:
- • Nos enriquecernos como profesionales.
- • Construimos una sociedad más igualitaria y, por tanto, más justa.
Estamos convencidos de que podemos aportar valor, a través de los proyectos que se están liderando desde las iniciativas en RSC de las grandes compañías, cuyos objetivos están íntimamente ligados con los 17 ODS (objetivos de desarrollo sostenible) tan conocidos e interiorizados, en la estrategia corporativa por los comités de dirección en las empresas líderes a nivel mundial. Con algunos ejemplos bastaría para darnos cuenta de que esto que menciono es real.
Actualmente en Bejob, estamos trabajando en proyectos relacionados con el ODS-5, que es alcanzar la igualdad entre los géneros y «empoderar» a las mujeres y las niñas; estamos hablando por ejemplo, del proyecto «DesArrolladoras de Samsung»: mujeres formadas en Inteligencia artificial y Big Data, sin conocimientos previos de tecnología. Los resultados del proyecto DesArrolladoras están siendo magníficos. Hemos formado ya a más de 1.000 mujeres con una calidad de desempeño alta y con una implicación por su parte, digna de reconocimiento. Puedo compartir en este artículo el testimonio de una de las alumnas: «el programa Samsung DesArrolladoras me ha aportado la oportunidad de reciclarme y seguir avanzando tanto personal como profesionalmente. Me ha abierto una puerta a mi nuevo futuro profesional. Voy a seguir formándome en desarrollo web».
También contamos proyectos relacionados con el ODS-8, fomentar el crecimiento económico sostenido inclusivo y sostenible, el empleo pleno y productivo y el trabajo decente para todos. En este caso y como ejemplo tenemos proyectos en los dos extremos de la pirámide de edad.
- 1. Jóvenes, menores de 30 años, que ni estudian ni trabajan, porque se quedaron fuera del sistema educativo y ahora les cuesta encauzar su futuro, tienen ganas, pero NO SABEN, cómo...
- 2. Mayores de 55 años desempleados, que tienen unas increíbles ganas de trabajar y aportar su amplio conocimiento en el mundo laboral. Personas que su capacidad de aprendizaje está más que demostrada y son de gran valor para nuestras organizaciones.
Todos nuestros proyectos están relacionados con el ODS-4; garantizar una educación de calidad inclusiva y equitativa, y promover las oportunidades de aprendizaje permanente para todos.
Desde mi punto de vista, la aportación de las compañías desde su RSC, es total y definitiva: si formamos en igualdad, en sostenibilidad, en medioambiente, en sociedades pacíficas, estamos formando en maneras diferentes de hacer las cosas que nos ayuden a construir un mundo mejor. Es una suerte trabajar con compañías implicadas en proyectos que cuidan y luchan por todo ello con una amplia visión social.
Animo, desde esta pequeña reflexión, a que todas las empresas nos movamos en la misma dirección y que juntos, nos pongamos a crear este futuro en el que muchos creemos.